Mi estado evolutivo

Hace tres días estoy acá, envuelta en una nube de humo, con mi imagen sepultada detrás de restos de envases de cerveza vacíos.
No quise moverme del lado del teléfono por si me llamaba. Creo que voy a tener que relevar una queja al servicio de comunicación porque el maldito nunca sonó, seguramente anda mal, alguna falla…
He podido notar còmo, increíblemente, la mente humana cambia de decisiones en un breve periodo de tiempo: en mi cabeza se ensayaron respuestas muy diferentes ante el caso de que me llame:

DIA 1: "No sé para qué me llamas, lo nuestro ya fue, vos mismo lo dijiste boludo así que ahora no sé qué buscas….Yo estoy joya…estoy re bien, haciendo un montón de cosas productivas que antes no tenía tiempo para hacer…La verdad que estos días no pensé en vos, estuve muy ocupada...¿Así que estas triste?...bueno gordo lo lamento vos lo quisiste así, ahora nos espera una nueva etapa…No, no insistas para qué nos vamos a volver a ver, eso empeoraría las cosas…Bueno no te enojes, un besito, chau"

DIA 2:" Hola…y bueno acá estoy bien pero un poco rara…si claro que te extraño pero tenias razón esto era lo que necesitábamos…Si, a veces pienso en vos con nostalgia y alegría… Claro, por todo lo que vivimos pero bueno ya esta, ya fue, somos jóvenes…Si... tenes razón podríamos juntarnos a tomar una cervecita si a fin de cuentas nos llevamos bien, bueno pasate cuando quieras, chauchi!!!"

DIA 3: ¿¿¿Amor por que te fuiste???, te perdono todo, volvè, como sea pero volve, estoy hace tres días sentada al lado del teléfono…Noooo, no estoy bien un carajo!!!te extraño voy a cambiar, voy a ser tu esclava, me someto a lo que quieras pero VOLVEEEEEEEE!!!!!!!!!!!


Pero no, el teléfono no sonó. Voy a salir a dar una vuelta pero primero tengo que arreglar mi cara…lástima que el corrector de ojeras no es mágico y que el delineador no dibuja milagros.