Esta Neurotica soy yo...Conozcanme

Mi foto
Intelectualoide psicopata autodestructiva. Fumadora compulsiva. Hombreriega empedernida. Guaranga persiguiendo a su ex.
CONTACTESE CON ESTA PELOTUDA ESCRIBIENDO A masqueunacabra@hotmail.com.ar

jueves, 13 de enero de 2011

Esas cosas ciclicas que tiene el alcohol


Si el hígado está donde yo creo que está entonces eso es lo que me anda doliendo de lo lindo, aun así me voy al bar que es un lugar agradable para tomar alcohol y muy eficaz
para las que nos abrimos fácil de piernas por que allí habitan también quienes se bajan rápido la bragueta.
Entro y hecho un vistazo. No hay casi nadie. En un rincón parlotean tres tipos que a simple vista parecen estar pal arrastreo de ala, que estàn bàrbaros los tres. Pero como bien canta la Bersuit…es necesario “tomar un par de tequilazas para afinar la vista”.
Me pongo cómoda, me pido un trago y analizo la situación.
Primeros tragos que ingiero: Empiezo a ponerme ansiosa y selectiva. Uno de los tipos parece ser cocinero, de esos chef que denominan a sus platos con diminutivos y mientras mas chiquitito es el nombrecito mas caro es el platito: Pecetito a la ciruelita; patitas de cerdo con papines; salmoncito ahumado con salsa de berenjenitas (etc). Me hace acordar a esos forros del gourmet que cocinan zarpado y la pasan bomba, viajando por todo el mundo para mostrarnos las mil variedades de hojas verdes y tipos de morrones mientras chupan buen vino y papean re piola.
Los otros dos dan que desear, el que más me calentaba la toronja esta dejando de gustarme…embadurnado de gel…me aburre…bañado de perfume me da que pensar que tiene un olor a pata de la mierda y a bolas que ni te cuento.
El otro – que tiene pinta de empleado bancario, medio calvo, con camisa marca cara- se para cada vez que empieza una canción y hace un bailecito que asusta, y cuando parece que alguno de ellos dice algo gracioso aplaude exageradamente, seguro que el gil es de los que fingen el orgasmo.
Estos papa frita me están rompiendo las pelotas y no entra nadie nuevo al bar. Parezco la divorciada sola y mala onda que se sienta lejos de todos con cara de tuje a chupar whisky. Uno de ellos, el supuesto olor a patas y bolas, se me acerca y me invita a sentarme con ellos en la mesa. Como soy puta y necesitada acepto. Empiezo a detestarlos, hablan puras pavadas pero como invitan tragos me re contra instalo en la mesa.
Le mando mensaje a mis amigas contándoles lo plomazo que son los hombres por acá.

Segundos tragos: Comienzo a intersarme en la conversación de estos tipos. La nariz de uno ya no me parece tan grande y el peinado del supuesto chef ya no me parece cresta de gallo sino cool y simpático. Empiezo a digerirlos físicamente y hasta me olvido de mi dolor de hígado y bebo como loca.
Pienso que los tres están pasables, que no son tan feos y que hasta me iría con alguno de ellos. Le mando un mensaje a mis amigas contándoles de mis nuevos conocidos que ya me están haciendo invitaciones para el cumple de uno que se avecina…acepto aunque para mis adentros me digo que no, que esto queda acá, que con los pelotudos no hago sociales mas que una noche de borrachera.

Terceros tragos: Voy al baño ya casi tambaleándome, cuando me paro me pispean el orto y eso me encanta. En el baño me choco contra la puerta mientras meo y mientras pienso en qué copados son estos chabones, ojala que sigamos en contacto, les voy a dar mi teléfono para que algún día vengan a comer pizza a mi casa.
Le mando mensajes a mis amigas contándoles lo divertida que estoy con mis tres amigos nuevos y que ojalà me vaya con los tres juntos esas noche por que los tres son divinos aunque físicamente dejen que desear.

Cuartos tragos: están bárbaros los tres.
Pero ninguno me invito a irme con él.